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¿Sabías que el 40% de los propietarios españoles no saben cuál es el certificado energético de su vivienda? Hoy en día, aumentar la eficiencia energética de la vivienda ha pasado a ser en un verdadero reto. Y es que cada vez se valora más vivir en una casa que sea respetuosa con el medio ambiente y cuyo consumo sea más sostenible. De hecho, la búsqueda de viviendas más eficientes energéticamente sea ha incrementado más de un tercio desde la pandemia.
Por esta razón, el certificado energético de vivienda es actualmente un documento clave, pues en él se muestra el nivel energético de la casa, lo que especifica cuál es su consumo energético y sus emisiones de CO2.
Pero, ¿qué es exactamente el certificado energético de vivienda? ¿Es indispensable? ¿Cómo se pide y cuánto cuesta?.
En todas estas situaciones, podrás contar con nuestro gran equipo de abogados con más de diez años de experiencia. Tanto de forma telefónica como por email o presencial. Correo: info@vecindia.es Tel: 910.353.034
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El certificado energético de vivienda o certificado de eficiencia energética es un documento oficial redactado por un perito especializado en el que se especifique la calificación energética de un edificio o parte del mismo. Tiene una vigencia de 10 años.
Lo que se evalúa es el consumo y la necesidad energética de un inmueble teniendo en cuenta distintas cuestiones y prestaciones disponibles, como la iluminación, los dispositivos de ventilación, el agua caliente o la calefacción. Pero también se tienen en cuenta elementos arquitectónicos como los materiales de carpinterías, del cerramiento exterior, de los equipos de climatización y de las ventanas.
Para ello, se incluyen datos objetivos sobre las características energéticas del inmueble y, para redactar el documento, se utiliza como referencia el consumo de energía del edificio durante un año en condiciones normales de ocupación y funcionamiento. Recogiéndose también información sobre las instalaciones de luz y gas, y la cubierta térmica.
Su propósito es que los futuros propietarios o arrendatarios de la casa puedan saber cuáles son los valores de referencia que ayudan a analizar la calificación energética de forma rápida y fácil, a un golpe de vista. Para ello, se emplea un código de etiquetas y colores con una progresión que va desde la A hasta la G, siendo la A la calificación más alta y la G la más baja.
La idea original del mismo era facilitar las operaciones de compra y alquiler en aquellas propiedades que contasen con una calificación elevada, aumentando su atractivo entre los demás, de manera que el parque de viviendas fuera mejorando de manera progresiva para despertar el interés de potenciales compradores o arrendatarios.
El Real Decreto 390/2021 determina que el certificado energético de vivienda es necesario en España para poder arrendar o poner a la venta una vivienda, así como para aquellos propietarios que estén pensando en dedicar una casa como alquiler turístico. Están obligadas a ello las siguientes construcciones:
Durante la visita, el perito hace un croquis, toma medidas, comprueba los evaluar de climatización y calefacción y examina los materiales de los cerramientos y fachadas. Se realizan mediciones de sótanos, cubiertas, fachadas y huecos, y se analizan los consumos y potencias eléctricas, así como el tipo de edificio, los puentes térmicos, los materiales arquitectónicos, la antigüedad y los aislamientos de cubiertas y paredes.
Tras este procedimiento se creará un plano y se introducirán los datos en un programa informático que brindará una calificación energética en concreto a la casa. Después, creará un documento con la certificación para que lo guardemos, donde aparecerán las recomendaciones de optimización para aumentar la calificación energética más adelante.
En este documento se contempla información como la descripción de las características energéticas de la propiedad, la referencia catastral de la construcción, la legislación sobre ahorro, el protocolo que se ha desarrollado para solicitar la calificación energética y la eficiencia energética aplicada en el momento de la construcción. Pero también pueden recogerse otros datos como las pruebas y verificaciones llevadas a cabo por el perito a lo largo de la etapa de calificación y el día de visita a la casa.
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La ocupación ilegal de viviendas se ha convertido en un negocio muy sencillo y muy lucrativo para muchas mafias, por lo que la cantidad de usurpaciones no ha dejado de crecer en los últimos años. Solamente en el año 2017 se produjeron más de 10.000 ocupaciones ilegales denunciadas e investigadas por las fuerzas y cuerpos de seguridad, siendo Madrid y Cataluña las comunidades más castigadas. Actualmente, se calcula que en España hay alrededor de 87.000 viviendas ocupadas ilegalmente.
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