Contrato de arrendamiento para uso distinto a vivienda

Contrato de arrendamiento para uso distinto a vivienda: características de nuestra asesoría legal y jurídica

Pese a que hay otras modalidades de contratos de alquiler como el de los arrendamientos rurales o de servicios, lo cierto es que los contratos de alquiler residencial son los más conocidos y frecuentes. Teniendo estos una normativa específica que varía en función de la fecha de la firma del contrato. La regulación básica se contempla en la Ley 29/1994, de 24 de noviembre, de arrendamientos urbanos y en el Decreto 4104/1946 de 24 de diciembre, siendo esta última la que se aplica a todos los contratos que hayan sido firmados antes del mes de mayo de 1985.

El caso es que la problemática que puede derivarse de este tipo de alquileres es muy variada, teniendo especial importancia el Derecho transitorio y puede enmarcar materias tan variadas y disputas como la ley a la que queda sujeto un contrato específico, los subarriendos, las subrogaciones inter vivos o por causa de fallecimiento, las actualizaciones de renta antigua, la permanencia mínima del contrato, las consecuencias por obras o los deberes y derechos del arrendatario y del arrendador.

Entre los problemas más frecuentes que suelen surgir en los contratos de arrendamiento de vivienda destaca la falta de pago del alquiler que, generalmente, lleva al desahucio. Pero también hay otros motivos por los que el arrendatario puede ser desahuciado como el alquiler o la cesión sin consentimiento, la necesidad de la vivienda por parte del arrendador para sí mismo o para un pariente, por modificaciones de uso de la vivienda, la ejecución de actividades perjudiciales o peligrosas o simplemente el incumplimiento de alguna condición del contrato. En el caso del inquilino, éste puede rescindir el contrato de arrendamiento sin el arrendador no efectúa las obras de mantenimiento oportunas, por las perturbaciones que realice el propietario en el uso de la vivienda y por la pérdida de la finca o su declaración como ruina.

Además, también nos encargamos de todas aquellas notificaciones, comunicaciones o contrariedades que estén vinculadas a la relación arrendaticia, como prórrogas, revisiones de la mensualidad, entregas de llaves, notificación de rescisión de contrato, traspasos, subarriendos y cesiones de contrato.

En todos estos casos en los que surjan conflictos en un contrato de arrendamiento de una casa, siempre es recomendable acudir a un abogado especializado en alquileres para que nos de el asesoramiento necesario y nos ayude a encontrar la mejor solución en cada situación. El bufete de abogados de Vecindia estará encantado de ayudarte a resolver cualquier problema que pueda surgir y a solucionar todas tus preguntas.