El primer paso será el procedimiento monitorio en el cual se presentarán la identificación del moroso, su vivienda, la cantidad de la deuda y los documentos certificativos de todo ello. La solicitud será notificada de forma personal, dándole un periodo de 20 días para proceder al pago. Si no paga se ejecutará el proceso.
El procedimiento monitorio es un proceso rápido y muy efectivo para este grupo de requerimientos, ya que la simple solicitud inicial de la deuda acarrea un coste al moroso cuando se presenta con la ayuda de abogado y procurador. Y, en el supuesto de que se oponga, implica mucho más gastos, además del embargo preventivo de sus posesiones. Con lo cual, utilizar los servicios de un abogado para estas eventualidades, puede bastar para conseguir que el deudor quiera pagar, pese a que se haga bajo un acuerdo con ventajas de pago.
Cuando el deudor expone un escrito de oposición, la materia se resolverá en los juzgados. El escrito deberá ir rubricado por abogado y procurador cuando la intervención fuera indispensable por tratarse de una cuantía por encima de los 2.000 euros. La desventaja de este tipo de proceso es que puede llegar a prolongarse excesivamente en el tiempo y los vecinos deberán adelantar el dinero a partir del mismo instante en el que se interpone la demanda sin posibilidad de embargar hasta que se haga el juicio. Lo cual ciertamente es más dilatado y difícil.
Deja que nos ocupemos de todo en Vecindia y nuestro equipo de abogados se encargará de facilitarte la consultoría legal y jurídica de deudas y morosos en comunidades de vecinos que necesites, haciendo que el proceso sea mucho más claro y simple, de forma que los propietarios como vosotros no os veáis obligados a perder vuestro tiempo ni agobiaros por nada.
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Si se necesita comenzar un procedimiento de reclamación de deudas a un vecino deudor, la mejor opción es contratar a un abogado especialista en Ley de Propiedad Horizontal que se ocupe de ejecutar todas las diligencias indispensables.
Las cuotas de participación están reflejadas en los reglamentos de la comunidad y todos los propietarios están obligados a participar en los gastos comunes de conservación de los servicios referentes a la comunidad. Así mismo, en circunstancias inusuales por las que se aprueben derramas para obras y contingencias concretas, todos y cada uno de los dueños de las viviendas también están obligados a pagarlas. Cuando no se verán obligados a pagarlas es cuando hablamos de una labor de mejora que no sea imprescindible y a la que se haya opuesto. Por lo que, es posible que no pueda har uso de ella.
Al mismo tiempo, hay que saber que cuando un nuevo propietario adquiere la vivienda de un propietario moroso, éste tendrá que encargarse de la deuda de los tres años previos a la adquisición. Y también, en el supuesto de que se aprueben trabajos o gastos que se paguen más adelante, será el propietarionuevo propietario de ese momento el que tenga que responder por ese gasto. Por este motivo, es esencial que con anterioridad a comprar una vivienda, deberás indagar con diligencia todo lo relativo al estatus de las deudas del inmueble.
Que exista un moroso entre los residentes es un problema que empeora aún más cuando se trata de una comunidad con pocos vecinos, puesto que los gastos se tienen que repartir entre menos vecinos. Se considera moroso al vecino que no se mantiene al corriente de los pagos de las cuotas de la comunidad, también pierde su derecho a votar en las reuniones de vecinos. Si quieres enfrentarte a deudas y morosos en tu comunidad de propietarios se debe proceder siempre de acuerdo a la ley, teniendo en cuenta qué es lo que podrá y lo que no puede hacerse.
De cualquier forma, la cuestión reside en que, en la mayoría de las situaciones, las deudas y morosos de una comunidad de propietarios pueden colocar en graves dificultades a la comunidad y es cierto que pretender reclamar a un convecino deudor no resultará sencillo.
Lo primero, por pragmatismo, es esencial prevenir que la deuda no llegue los 2.000 euros para así poder llegar a un acuerdo amistoso con el propietario moroso. En este tipo de casos se enviará una carta al propietario moroso con referencia a la deuda acumulada y a la obligación de hacer el pago. Si aun presionando, no conseguimos nada, se deberá convocar una junta de propietarios en la que hacer la liquidación de la cantidad adeudada y autorizar al presidente de la comunidad para demandar judicialmente, notificando el proceso al deudor por medio de un burofax. El propietario tendrá un periodo de tres días para abonar la deuda.
A partir de este punto, hay dos opciones: el proceso monitorio, el más aconsejable para las comunidades de vecinos, y el procedimiento declarativo que, en según la cuantía, será oral u ordinario. Cuando liquida la deuda, se termina el proceso; si no paga pero no interpone requerimiento se podrá ejecutar el decreto que se haya notificado; y si presenta oposición al requerimiento entonce se deberá iniciar el procedimiento ordinario si la cuantía sobrepasa los 6.000 euros y juicio verbal si no supera los 6.000 euros. En ningún caso es indispensable contratar a un abogado o procurador, pero sí es conveniente. Los abogados experimentados en comunidades de propietarios de Vecindia pueden dar esta clase de servicios con absoluta seguridad de triunfo.
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