Si has decidido arrendar una casa o un establecimiento comercial y te preocupan las posibles infracciones que puedan afectar a tus derechos como arrendador, no dudes en ponerte en contacto con nuestro bufete. Nuestro magnífico equipo de abogados especializados en alquileres crearán un contrato de alquiler atendiendo a tus requerimientos, de modo que la seguridad de la relación contractual esté siempre garantizada ante cualquier incumplimiento de la otra parte y tus derechos queden validados desde el punto de vista legal.
Si por el contrario, eres tú el arrendatario y vas a arrendar un piso y el propietario prepara un contrato de alquiler que te plantea algunas dudas por la redacción o la interpretación de determinadas cláusulas, también podrás ponerte en contacto con los abogados de Vecindia tanto para que realicemos un análisis del mismo o solucionen todas las dudas que se te puedan plantear. De manera que puedas saber cuáles son tus derechos y deberes contractuales como arrendatario.
En el supuesto de que se produzcan incumplimientos en las relaciones entre las dos partes, como obras sin consentimiento, falta de pago de rentas o desatención del plazo de terminación del contrato es de vital importancia tomar medidas rápidamente para evitar que el problema se enquiste y se acabe prolongando en el tiempo. Nuestros abogados especialistas en contratos de arrendamiento de vivienda actuarán con urgencia y con rotundidad en defensa de tus derechos, primero intentando encontrar una solución al problema sin llegar a los tribunales y si no se puede, activando los procedimientos judiciales para proteger tus intereses.
En todas estas situaciones, podrás contar con nuestro gran equipo de abogados con más de diez años de experiencia. Tanto de forma telefónica como por email o presencial. Correo: info@vecindia.es Tel: 910.353.034
Cuidamos al máximo a nuestros clientes y las situaciones por las que pasan, por eso queremos mostrarte como hemos ayudado a otras personas como tu en situaciones similares. Descúbrelo en nuestros casos de éxito.
Conocemos bien las preocupaciones de nuestros clientes y que no son todas las mismas, por esta razón estudiamos nuestros casos de manera particular, con esmero, rapidez y a un precio para todos, en el terreno legal, con el objetivo de que no os tengáis que preocupar de nada..
Un gran equipo de expertos con más de diez años de trabajo y más de quinientos casos solucionados con éxito.
Aunque hay otras modalidades de contratos de arrendamiento como el de los alquileres rurales o de servicios, la realidad es que los contratos de arrendamiento residencial son los más conocidos y frecuentes. Teniendo estos una normativa específica que varía en función de la fecha en la que se firmó el contrato. La normativa básica se contempla en la Ley 29/1994, de 24 de noviembre, de arrendamientos urbanos y en el Decreto 4104/1946 de 24 de diciembre, siendo esta última a la que quedan sujetas todos aquellos contratos que hayan sido firmados antes del mes de mayo de 1985.
La cuestión es que la complicación que puede derivarse de este tipo de alquileres es muy heterogénea, teniendo especial importancia el Derecho transitorio y puede recoger cuestiones tan diversas y disputas como la ley a la que queda sujeto un contrato en concreto, los subarriendos, las subrogaciones inter vivos o debido a un fallecimiento, las revisiones de renta antigua, la permanencia mínima del contrato, las consecuencias por obras o las obligaciones y derechos del inquilino y del propietario.
Entre los conflictos más habituales que suelen generarse en los contratos de alquiler de vivienda destaca la falta de pago de la renta mensual que, generalmente, termina en desahucio. Pero también hay otros motivos por los que el arrendatario puede ser desalojado como el alquiler o la cesión sin consentimiento, el requerimiento del inmueble por parte del arrendador para sí mismo o para un pariente, por modificaciones de uso del inmueble, la puesta en marcha de actividades nocivas o que entrañe algún peligro o simplemente el quebrantamiento de alguna disposición del contrato. En el caso del inquilino, éste puede rescindir el contrato de arrendamiento sin el propietario no lleva a cabo las tareas de mantenimiento necesarias, por las perturbaciones que ocasiones el propietario en la utilización del inmueble y por la pérdida de la finca o su declaración como ruina.
Además, también nos ocupamos de todas las instrucciones, comunicaciones o contrariedades que tengan que ver con la relación arrendaticia, como renovaciones, revisiones de la mensualidad, entregas de llaves, comunicación de fin de contrato, traspasos, subalquileres y cesiones de contrato.
En todos estos supuestos en los que surjan problemas en un contrato de alquiler de una casa, siempre es recomendable acudir a un abogado especializado en arrendamientos para que nos proporcione el consejo necesario y nos ayude a encontrar la mejor solución en cada situación. El equipo de abogados de Vecindia estará encantado de prestarte su ayuda para solucionar cualquier problema que pueda generarse y a resolver todas tus preguntas.
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¿Te parece que estás pagando demasiados intereses por tu hipoteca? Seguramente seas uno de los miles de afectados por las cláusulas suelo. La cláusula suelo era una cláusula que se incluía en los contratos de préstamos hipotecarios de tipo variable hace unos años y que se vinculaba al Euribor o a otro índice de referencia, […]
Como realizar impugnación de cuentas en comunidades de propietarios: en las Comunidades de Propietarios pueden generarse problemas de funcionamiento derivados de los conflictos entre los intereses de los distintos vecinos. Muchas veces por una mala aplicación o interpretación de algún artículo de la Ley de Propiedad Horizontal. Por ejemplo, una derrama derivada de un nuevo gasto, las obras en el edificio, la instalación de un nuevo servicio o la distribución de los presupuestos anuales.
Teniendo en cuenta que, por regla general, el comprador necesita como mínimo de 15 días para tramitar la hipoteca y que la Nueva Ley Hipotecaria obliga a los futuros hipotecados a acudir al notario con un mínimo de 10 días antes para informarse sobre las condiciones y cláusulas concretas del préstamo, el plazo para escriturar puede demorarse al menos un mes. Además, conviene ser cautelosos y dejar un buen margen de maniobra, ya que el plazo que se pacte en el contrato de arras es el máximo permitido. No pasa nada si se firma en Notaría antes de la fecha límite, pero podemos encontrarnos en problemas si necesitamos pedir una prórroga para poder escriturar.
